Razones para usar malla protectora para tus plantas

Cuando es invierno y no es práctico levantar o mover plantas de tu jardín, la mejor manera de protegerlas del frío y la humedad del invierno es envolverlas. En áreas expuestas o frías, incluso las plantas relativamente resistentes pueden necesitar protección. Usar mallas protectoras o malla antiheladas es una forma fácil de proteger tus plantas durante el invierno. Te contamos a continuación más razones para usar una malla protectora.

La malla protectora mantiene el calor en el suelo y evita que las plantas se congelen

Las mallas protectoras son conocidas también como mallas de hibernación, velo de hibernación, mallas antiheladas o telas antiheladas. Están fabricadas de un material poroso, ligero y permeable  llamado polipropileno no tejido, que protege los cultivos y plantas de condiciones climáticas adversas.

Al usar una malla, puedes evitar que la nieve y el hielo dañen tus plantas. Y como es un tejido transpirable, deja pasar la luz y el agua, permitiendo el crecimiento de las plantas. Así que la malla también puede ayudar a conservar el calor de las plantas. 

Las envolturas con malla protectora de plantas se colocan mejor con la primera advertencia de heladas.Para evitar la sudoración y la posible pudrición, las cubiertas protectoras se deben quitar cuando se pronostican períodos prolongados de clima muy templado, pero se deben reemplazar según sea necesario si el clima vuelve a ser frío.

Una vez que haya pasado todo el peligro de heladas severas y haya comenzado un nuevo crecimiento en la primavera siguiente, retira los envoltorios por etapas o en un día nublado para permitir que la planta se aclimate. 

 

La malla protectora evita que las plantas sean arrancadas por el viento o dañadas por el hielo

Incluso las plantas resistentes pueden dañarse o morir en una ola de frío prolongada, especialmente cuando hay vientos fríos por muchos días. Por otro lado, los brotes que se plantan antes de la primavera durante un período de clima templado son vulnerables a las quemaduras, sobre todo si el clima se vuelve más frío y son sometidos a fuertes vientos o heladas.

Considera que no se trata solo de la profundidad del período frío, sino de su duración: las condiciones de congelación que se prolongan durante varias semanas serán más dañinas para tus plantas que en condiciones similares. Y puede ser incluso peor estar mucho tiempo expuestas al frío que aquellas que están sometidas solo un par de días.

Para instalar las mallas protectoras en tus plantas, es importante eliminar cualquier residuo húmedo de la base de la planta y asegurarse de que la corona esté llena de abundante material seco, como paja o helechos secos. De esta manera la humedad evitará que tu planta se congele y se dañe durante el invierno

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